El Grupo Operativo GO HIGOS identifica y ofrece alternativas para solucionar este grave problema en el sector del higo extremeño
Uno de los problemas que más preocupan cada campaña a los productores de higos secos y frescos de Extremadura, región que lidera la producción a nivel nacional, son los datos causados por las aves e insectos. Y que ocasionan importantes pérdidas económicas al reducir en algunos casos de forma muy notable el volumen de producción de higos de calidad.
Este fue uno de los temas analizados en el primero de los talleres orientados a los productores que el Grupo Operativo GO Higos celebrado en las instalaciones de Adismonta en Torre de Santa María (Cáceres).Este grupo operativo, cuyo objetivo es la “Aplicación de Estrategias Innovadoras en el sector del higo seco español para una máxima calidad higiénico sanitaria” está compuesto por la propia ADISMONTA, la Cooperativa Regadhigos de Almoharín, APROCEX, la Agrupación de Cooperativas del Valle del Jerte, Higos El Pajarero, Gredosur Soc. Coop de Poyales del Hoyo en Ávila y la cooperativa Sierra de Montehigos de Montánchez. Y en su parte técnica con la colaboración de la Universidad de Extremadura y CICYTEX.
El análisis de esta problemática fue expuesto de forma muy didáctica para los productores de higos presentes por Antonio Jesús Galán, del Área de Fruticultura Mediterránea de Cicytex. En un estudio realizado en 18 higuerales de diferentes puntos de la región en los años 2020 y 2021 se cuantificaron e identificación los daños en higos secos. En tres sistemas de manejos diferentes y dos regímenes hídricos. Y las conclusiones fueron sorprendentes ya que entre el 8,7% y el 42,4% de los higos presentaron algún tipo de daños. Las aves, entre los que destacan los estorninos, urracas y rabilargos, provocaron entre el 11 y el 33,4% de los años, seguidos de los insectos -entre las que figuran de forma muy visibles las hormigas- causaron entre el 1,8 y el 8,6% de los daños, y por último los hongos entre el 0,3 y el 1,2% de los daños.
Manejo en campo
Una de las conclusiones del análisis de los expertos del Cicytex es que el alto nivel de manejo en campo del higueral reduce significativamente los datos provocados por aves, insectos y hongos. De ahí la importancia de mantener una estrategia activa de prevención, identificación y control de los mismos. Una problemática que se agrava en muchos casos en las plantaciones con regadío, que han crecido de forma exponencial en los últimos años en Extremadura buscando más estabilidad en la producción y sobre todo más calibre del fruto. El gran problema de los higos dañados por aves, insectos u hongos es que no serían aptos para su consumo humano, al menos de forma directa.
Otros problemas que afectan a la calidad final del producto y su comercialización directa son la mosca de la fruta, que pudre los frutos al destruir la pulpa; la mosca negra del higo; la mosca del vinagre que produce fermentaciones en la pulpa; diferentes lepidópteros que provocan el apolillado de higos; la cochinilla de la higuera que produce una secreción de melaza donde se pueden instalar hongos y los nemátodos, que al principio provocan en las higueras cierta debilidad y disminución de la producción.
En el caso del control de aves, además de métodos tradicionales para ahuyentarlos como carburos o cintas reflectantes, se está experimentando con mallas que recubren todo la copa de la higuera con resultados satisfactorios hasta ahora. En el caso del control de plagas en precosecha, se dispone de diferentes tipos de productos autorizados como aceite de parafina y naranjo, azufre, hidróxido cúprico y oxicloruro de cobre entre otros.
La financiación las ayudas recogidas en el Grupo Operativo GO Higos se realizarán en un 80% con cargo al FEADER y en un 20% con cargo al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Montante total de la ayuda: 517.899,12 de euros.
